Das mucho, y recibes poco?
- psic.elizabethga
- 29 jul 2020
- 3 Min. de lectura

Sientes que tú das mucho para la relación, pero recibes poco??? Algo va mal si te preguntas esto y se te estás cansando, si te invade la tristeza, la desilusión o el desencanto, si sientes que lo que haces por la otra persona ya puede ser una carga cuando no debería serlo.
Te has llegado a preguntar por que te sientes sola, si estas acompañada??
Hay veces que tenemos la sensación de que estamos dando y dando pero, sin embargo, no estamos recibiendo. Esto nos suele ocurrir cuando estamos tristes, pues no obtenemos ningún tipo de recompensa tras el acto de dar y acabamos pensando que el mundo no es merecedor de nuestra dedicación. Porque dar mucho y recibir poco, cansa y desgasta. y esto nos demuestra que tenemos ligada la idea de dar con recibir, y queremos recibir lo mismo que damos, olvidamos que todos somos diferentes y por consecuencia, hasta el dar es diferente y también el saber recibir. hay quienes reciben y salen huyendo... y otros que solo esperan recibir.
¿¿Damos de mas por que creemos que tenemos que ganar un amor??
Muchas veces entramos a un “juego”, en el que hemos empezado a “comprar” el amor de los demás, con detalles, atenciones, con regalos, con favores y compromisos, en los que nosotros mismos nos hemos metido, hemos establecido una dinámica en la que nuestro valor depende de nuestras acciones, nuestras acciones por y para esa otra persona.
Pareciera que si las acciones desaparecen o decrecen, nuestro valor lo hace con ellas.
Nos han enseñado, en el pasado, y nosotros lo reafirmamos con nuestro comportamiento en el presente, que para que te quieran, “te lo tienes que ganar”, “tienes que hacer”, si no te lo ganas, si no haces, no te van a querer, tan simple y tan estremecedor como eso. Una de las grandes piedras que cargamos cuando no hemos recibido el amor incondicional que necesitábamos y merecíamos.
El amor no se gana, no es un premio que se da o se quita.
Unas de las cosas que necesitamos aprender es saber; que tanto dar, y como dar... todo hasta el punto que siga siendo sano para nosotros.
RECUERDA: No vale de nada luchar contra viento y marea y dar mucho por una persona que no mueve ni un dedo. No sirve ayudar constantemente a alguien con un trabajo que no está interesado en aprender a realizar. No nos hace bien dar sin recibir.
No podemos dedicarnos a los demás y olvidarnos de nosotros. La única GRATITUD sin la que no podemos vivir es la gratitud a uno mismo, pues es el pilar del amor propio y el cimiento de nuestro crecimiento personal.
La reciprocidad sana es aquella que tiene como base un intercambio que responde a la gratitud. Ofrecer un gracias o cualquier otro acto de recompensa es reconocer que la persona a la que tenemos delante hizo algo que nos produjo felicidad.
El agradecimiento es un importante pilar para nuestro bienestar y para nuestra salud. Su ausencia nos duele y nos frustra, llegando a crear una espiral de lamentos y de quejas que nos hará sentirnos tristes y desilusionados.
Agradecer y ser receptores de gratitud nos hace sentir personas válidas y merecedoras de amor, lo que mantiene nuestra autoestima y nuestro bienestar emocional en buenas condiciones.
ES IMPORTANTE que no olvides cual es tu naturaleza, si quieres dar, hazlo!! pero hasta donde sea sano, también debemos ser realistas y reconocernos que tal vez estamos dando esperando recibir algo, y muchas veces nos engañamos sabiendo que de ahí no vamos a recibir, pero continuamos... dar es hermoso, no llegues al punto donde te permitas perder esa hermosura....
Te dejo la siguiente frase de Erich Fromm:
"Dar produce más felicidad que recibir, no porque sea una privación, sino porque en el acto de dar está la expresión de mi vitalidad."
ELIZABETH GA
Comments